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En la búsqueda constante de soluciones ortodónticas eficientes y discretas, los avances tecnológicos han llevado a mejoras significativas en el tratamiento con alineadores transparentes. Inicialmente introducido como una alternativa estética, el sistema Invisalign revolucionó la ortodoncia al ofrecer una corrección discreta con dispositivos que se integran de manera natural en la vida cotidiana. Aunque el sistema original presentaba algunas limitaciones en el control del movimiento radicular y en el manejo de casos más complejos, los continuos desarrollos en materiales, la incorporación de ataches y la aplicación de nuevas fuerzas han ampliado considerablemente su aplicabilidad.
En este artículo exploraremos el uso de alineadores transparentes, con énfasis en el sistema Invisalign, en situaciones de extracción dental. Esto con base en la información del libro: “Principios y biomecánica del tratamiento con alineadores”, por el Dr. Ravindra Nanda, Tommaso Castroflorio, Francesco Garino y Kenji Ojima, publicado por la Editorial Amolca.
La capacidad de este sistema para abordar casos desde apiñamientos leves hasta situaciones más desafiantes, como extracciones múltiples, ha sido posible gracias a innovaciones recientes. Por ello, para ilustrar este enfoque, presentaremos el tratamiento de una paciente con un severo apiñamiento anterior, quien experimentó la extracción de tres premolares remanentes. Además, se destacará el papel crucial de la fotobiomodulación en acelerar el movimiento dentario y reducir la duración del tratamiento, abordando así una de las principales preocupaciones de los pacientes adultos.
Diagnóstico y plan de tratamiento
Al momento de visitar la clínica, la paciente de 25 años expresó su deseo de abordar el apiñamiento en la región superior y mejorar la estética de su sonrisa. Aunque su perfil facial se caracterizaba por su rectitud, se observó una ligera retracción de ambos labios con respecto a la línea-E. En el examen intraoral, se evidenció una relación molar de clase II, acompañada de una sobremordida horizontal (overjet) de 2 mm, una sobremordida vertical (overbite) de 3 mm y líneas medias coincidentes. Además, se identificó una discrepancia en la longitud del arco, siendo de 15 mm en el maxilar superior y 10 mm en el maxilar inferior. Cabe destacar una infralabioversión en ambos caninos superiores y una elevación significativa del segundo molar superior izquierdo.
Análisis cefalométricos
Estos análisis revelaron una relación esquelética de clase II, destacándose un marcado ángulo del plano mandibular (Figura 8.3). Los incisivos centrales superiores presentaban una leve inclinación lingual, mientras que los incisivos centrales inferiores mostraban una inclinación hacia el labio. La brecha lateral en la cabeza mandibular, corroborada por la radiografía panorámica, no afectaba la función mandibular. Aunque se identificó una ligera regresión en el tejido periodontal alrededor de los caninos superiores, no se observó movilidad dentaria, y la profundidad máxima del saco periodontal era de 5 mm.
Con base en estas observaciones, se diagnosticó a la paciente con un caso esquelético de clase II, acompañado de infralabioversión en los caninos superiores y un marcado ángulo en el plano mandibular. El plan de tratamiento con alineadores transparentes consistía en la retracción de ambos incisivos centrales superiores e inferiores, requiriendo 17,8 mm de movimiento en el maxilar superior y 14,8 mm en la mandíbula. Como paso inicial, se llevaron a cabo extracciones de los dos primeros premolares superiores y el segundo premolar inferior derecho. El segundo premolar inferior izquierdo ya había sido extraído durante la adolescencia. Además, para facilitar el movimiento mesial, se extrajeron el segundo molar superior izquierdo y el tercer molar superior derecho. Ante las preocupaciones estéticas de la paciente con respecto a los dispositivos ortodónticos fijos y la posible duración del tratamiento, se optó por la implementación del sistema Invisalign, complementado con biofotomodulación (OrthoPulse) para acelerar el proceso de tratamiento.
Sistema Invisalign
Se empleó el programa ClinCheck para examinar la posición, el ángulo y los requisitos para la remodelación del canino en relación con la oclusión final deseada. En el caso de esta maloclusión de clase II, se identificó la necesidad de realizar un movimiento distal de 2 mm en los primeros molares superiores y un movimiento mesial de 2 mm en los primeros molares inferiores para lograr una retracción adecuada del incisivo. A pesar de las extracciones realizadas, el espacio disponible no resultó suficiente para mover los dientes anterosuperiores únicamente con la extracción del premolar. Para ampliar el espacio, se requirió una sobreexpansión de las arcadas dentarias. Los movimientos dentarios fueron simulados mediante el programa ClinCheck, estimando la cantidad de expansión necesaria en cada arcada, planificando las posiciones y determinando la forma de los ataches.
Progreso del Tratamiento con Alineadores Transparentes
Antes de iniciar el tratamiento, se procedió a la extracción de tres terceros molares, excluyendo el tercer molar superior izquierdo. Posteriormente, tras la extracción de los premolares superiores y el primer premolar inferior izquierdo, se dio inicio al tratamiento con alineadores. Para la distalización de los segundos molares, se emplearon todos los dientes superiores, desde el primer molar hasta el primer molar, como anclaje. En el maxilar inferior, se utilizaron todos los dientes, a excepción de los caninos y segundos premolares, como anclaje para el movimiento mesial de los caninos.
Debido a la inclinación hacia afuera de la raíz del canino inferior derecho, se llevó a cabo su movimiento mediante una inclinación simple; mientras que el canino inferior izquierdo se desplazó corporalmente a lo largo de su raíz. La distalización de los segundos molares superiores se completó en un lapso de 12 semanas, seguido por el movimiento distal de los primeros molares superiores, finalizando dos semanas después. Durante este periodo, se continuó con el cierre del espacio extractivo inferior mediante un movimiento mesial de los primeros molares inferiores.
Este artículo ha sido redactado con base en la información del libro: “Principios y biomecánica del tratamiento con alineadores”, por el Dr. Ravindra Nanda, Tommaso Castroflorio, Francesco Garino y Kenji Ojima, traducido al español y publicado por la Editorial de Libros de Medicina y Libros de Odontología, Editorial Amolca.
¿Qué procedió?
Después de 5 meses de tratamiento, se logró completar el movimiento de retracción de los caninos superiores, corrigiendo la posición de los incisivos de la línea media. En este punto, se recalculó el espacio de retracción de los incisivos superiores mediante una radiografía panorámica. Dado que los espacios de la extracción inferior se habían cerrado, fue posible utilizar todos los dientes, desde el segundo premolar hasta el otro, incluyendo los caninos, como anclaje para el movimiento mesial de los primeros molares inferiores. Se realizaron recortes de aproximadamente 3 mm en los márgenes del alineador para adaptar los ganchos adheridos directamente sobre los caninos superiores. Asimismo, se aplicaron botones linguales en los bordes distobucales de los primeros molares inferiores, y se recetaron elásticos de clase II (0,25 pulgadas, 6 onzas) para su uso durante 20 horas diarias. Con el objetivo de evitar la inclinación mesial de los primeros molares inferiores, se incorporaron ataches rectangulares verticales en los bordes mesiobucales.
Uso de elásticos de Clase II
En esta fase se evidenció una notable mejora en la relación anteroposterior, consolidándose una relación de clase I en los segmentos bucales. La fase subsiguiente se enfocó en la retracción de los dientes anterosuperiores, culminando la primera etapa según lo delineado en el programa ClinCheck tras 8 meses de tratamiento. En este periodo, se completó la distalización de los primeros molares superiores, dejando un espacio discernible en el borde mesial del primer molar superior izquierdo. El movimiento coordinado de los segundos premolares y los caninos inferiores permitió el cierre efectivo de todos los espacios mandibulares.
Para la fase de refinamiento del tratamiento con alineadores transparentes, se realizaron ajustes en las formas y posiciones de los ataches. Se llevó a cabo un análisis minucioso de las posiciones coronales y radiculares para determinar las condiciones óptimas. Transcurridos 9 meses de tratamiento, se confirmó la consistencia entre la compatibilidad del alineador y las posiciones coronales y radiculares. En las etapas finales de refinamiento, se verificó el contacto oclusal de los molares superiores e inferiores, obteniendo una relación oclusal de uno-con-dos-dientes en los segmentos bucales. Las correcciones de la sobremordida horizontal y vertical se limitaron a 1 mm. Al cabo de aproximadamente 10 meses de tratamiento, se procedió a retirar todos los botones, ganchos y ataches, y se orientó a la paciente a utilizar elásticos de clase II durante la noche durante un periodo adicional de 10 meses.
Resultados del Tratamiento Ortodóntico con Alineadores Transparentes
El tratamiento arrojó resultados altamente satisfactorios para la paciente, centrándose en su principal preocupación: la infralabioversión de los caninos. Esta preocupación fue abordada de manera efectiva, logrando una mejora significativa en la estética gingival y proporcionando una sonrisa más agradable, como se visualiza en las Figuras 8.12-8.14. La retracción de los incisivos superiores contribuyó a que el labio superior adoptara una posición más relajada y natural, logrando una armoniosa relación con la línea-E.
El tratamiento con alineadores transparentes no solo resolvió la queja principal, sino que también generó beneficios adicionales. Se alcanzó una relación molar de clase I, caracterizada por arcos simétricos y el cierre exitoso de todos los espacios, como se evidencia en la Figura 8.15. La corrección de la sobremordida horizontal (overjet) y vertical (overbite) siguió un enfoque fisiológico, resultando en una coincidencia precisa con las líneas medias faciales y dentarias. Estos logros no solo mejoraron la función bucal, sino que también contribuyeron positivamente a la estética general del paciente.